Una leyenda india nos permite reflexionar sobre
nuestro poder de decisión.
Un viejo indio decía a su nieto: "Me siento como si tuviera dos
lobos peleando en mi corazón. Uno de los dos es un lobo enojado, violento y
vengador. El otro está lleno de amor y compasión."
El nieto preguntó: "Abuelo, dime ¿cuál de los dos ganará la pelea en tu
corazón?"
EL abuelo contestó: "Aquel que yo alimente"
Hoy sabemos que una cantidad enorme de enfermedades ( depresión, ansiedad,
fobias) y un sin fin de conflictos (laborales, familiares, personales), no
están causados por lo que nos ocurre, sino por el monologo que día tras día
enviamos a nuestro interior. Si nuestros pensamientos y decisiones
desbordan pesimismo y desesperanza, si no dejamos de criticar y evaluar a
los demás y a nosotros mismos, y si solo percibimos defectos, errores, etc...
Entonces nos sentiremos terriblemente desgraciados. Nuestra manera de
pensar y decidir provoca sentimientos y actitudes similares a quien nos rodea.
Nuestro reto en la vida debe consistir en decidir qué actitud tomar para no
enfermar, para relacionarnos con los demás, para vivir. Si decidimos
vestirnos con pasión, alegría, optimismo, ilusión, no solo nos beneficiaremos,
sino que todos aquellos que nos rodean se dejarán arrastrar por una vida más
intensa y productiva.
La tragedia humana sin duda, es tener que elegir durante todos los días de la
vida y tener que renunciar a todo aquello que no se elige. Siempre
tenemos que enfrentarnos a dos alternativas igualmente interesantes a la hora
de escoger. Pero podemos decidir cambiar nuestros valores, ser dueños de
nuestro estado animo a cada instante, y sobre todo: reflexionar sobre nuestra
existencia. Pues dependiendo de nuestras decisiones y de nuestra
actitud positiva: "así será nuestra vida"
No hay comentarios:
Publicar un comentario